
La videoconferencia, presente y futuro en las pymes españolas
Las videoconferencias son una realidad en el entorno profesional. En la actualidad, un 37% de las Pymes españolas utiliza videoconferencia y se estima que en el 2015 alcanzará el 65,4%, llegando en el 2017 a más del 70%.
Esta previsión de crecimiento se debe a la necesidad, cada vez mayor, de trabajar y colaborar de forma remota. Así, el 63% de las empresas españolas cuentan con más de la mitad de sus empleados trabajando de forma remota. El 46,1% de las Pymes españolas esperan que el número de trabajadores remotos aumente en los próximos tres años.
Las videoconferencias no solo han permitido a las empresas reducir los gastos de viaje asociados a las reuniones presenciales tradicionales, sino que también han reducido la cantidad de tiempo que los empleados pasan fuera de la oficina, aumentando de este modo la productividad. Tener la opción de trabajar desde casa puede crear un entorno laboral más agradable para los empleados.
La tecnología ocupa un papel destacado. Vivimos en un entorno de trabajo global en el que tanto los empleados como los clientes de una misma empresa pueden estar repartidos por todo el mundo. Sin embargo, en un sentido virtual, estamos más cerca los unos de los otros de lo que jamás lo habíamos estado, y ello gracias al desarrollo tecnológico del software colaborativo. Cada vez hay más empresas, tanto, que están descubriendo que realizar reuniones a través de Internet puede ser beneficioso en muchos sentidos.
Así, las Pymes españolas ponen de manifiesto los tres motivos principales para usar videoconferencias. En primer lugar, la mejora de las relaciones con clientes y proveedores; en segundo lugar, dar la oportunidad de ofrecer un teletrabajo eficiente y, en tercer lugar, la reducción de desplazamientos.
En un entorno como el actual, donde la gestión del tiempo y la seguridad se vuelve vital, puede ser la elección perfecta para el crecimiento exitoso y continuado de empresa.
Fuente: encuesta realizada por IDC en enero de 2012 entre 1024 personas con influencia en las decisiones de compra de hardware y software de pequeñas y medianas empresas en 13 países de Europa.